Hay quienes pensarán que ya no tiene sentido, otros que es una salvajada. Los más urbanitas pensarán que es un arcaicismo bárbaro típico de gentes atrasadas y de pueblo. Pero es mucho más, es algo poderoso que conecta a la gente con su pasado, con la tierra. En la localidad de Aldea del Cano, en Cáceres, desde hace varios cientos de años se celebra una fiesta, un ritual de iniciación de paso a la edad adulta y de dominio de la naturaleza, que seguramente provenga de ritos de los pueblos prerromanos que sobrevivieron a las orillas del Salor y el Ayuela.
Demostrar que dominas la naturaleza y que has dejado de ser un niño se vinculó tiempo después al servicio militar, quedando ya para siempre esta expresión de fuerza unida irremediablemente a los quintos, y en estos tiempos, también a las quintas.
El Tuero permanecerá presidiendo la plaza de Aldea del Cano hasta el 24 de diciembre, en el que, uniéndose con los ritos mitraicos del "Sol Invictus" dan paso a las Saturnalias y las Navidades cristianas. No nos quedemos en la superficie, seamos capaces de mirar más allá de unos jóvenes excesivamente borrachos tirando un tronco al suelo... es mucho más profundo y más interesante si somos capaces de mirar esta fiesta, Al Detalle.