Os voy a contar, AL DETALLE, el origen del nombre de una de las principales calles de la ciudad: la avenida de Alemania, que comenzó a llamarse de esta manera a partir de un acuerdo alcanzado por el consistorio cacereño el 1 de marzo de 1939. Para comprender por qué se tomó esta decisión nos tenemos que trasladar hasta el 5 de septiembre de 1936 con la llegada de un avión alemán al aeródromo de Cáceres. Pero vayamos poco a poco…
Seguramente, aunque nunca lo podremos saber, la victoria del Bando Nacional en la Guerra Civil Española no hubiera sido posible sin la estrecha colaboración e intervención de los gobiernos fascistas europeos de la época: Alemania e Italia. En un principio Portugal se declaró neutral, aunque también apoyó a los militares sublevados, lo que convirtió a Extremadura en un enclave estratégico en esta terrible contienda. Por aquí no sólo hubo gran trasiego de tropas, armas… sino que se establecieron campamentos y bases de soldados alemanes, en el caso que nos ocupa hoy, la Legión Cóndor se instaló en los Castillos de las Arguijuelas, a escasos kilómetros de Cáceres.
Y como decía antes, todo comenzó con la llegada de un avión alemán al aeródromo de Cáceres el 5 de septiembre de 1936, en el que viajan el teniente nazi Walter Warlimont y el general italiano Mario Roatta para entrevistarse con Franco que tenía establecido su cuartel general en el Palacio de los Golfines de Arriba. El encuentro se produjo al día siguiente y se acuerda el envío de tropas de los fascistas alemanes e italianos para apoyar al fascismo español.
El 23 de septiembre es enviado a España Wilhem Josef Ritter von Thoma con su grupo acorazado y un cargamento consistente en 41 carros de combate Pankerkampfwagen, 20 cañones anticarro Pak 35/36 de 37 mm, 8 cañones de 20 mm, 10 camiones todoterreno (Kübelwagen) Büssing NAG-80, para remolcar plataformas portacarros. 45 camiones de carga (entre ellos 14 portacarros Vomag DL-48). 19 plataformas portacarros con ejes bajos Sd. Ah. 115. 18 motocicletas BMW R-12, 11 automóviles ligeros, 6 camiones taller y municiones para los tanques, todo tipo de armas ligeras con su correspondiente munición, así como diversos accesorios y piezas de repuesto para todos estos vehículos.
Este material es enviado por barco en un primer lugar y posteriormente cargado en trenes que irán de Sevilla hasta la ya casi abandonada estación de tren de Aldea del Cano, donde recalarán el 9 de octubre del 1936 para trasladarse definitivamente a los Castillos de las Arguijuelas. Éstos fueron cedidos para uso del Bando Nacional por el Vizconde de Roda. Labase cumplirá una doble función: depósito de armas yescuela de adiestramiento de soldados de infantería, quedando al mando de von Thoma.
Ese mismo 9 de octubre ocurrió un brutal accidente. Dos de estos recién llegados alemanes se estrellan contra un muro a gran velocidad en las inmediaciones del Paseo de Cánovas. A consecuencia del fatal choque murió el brigada Peter Kempe, de 24 años, mientras que su compañero Paul-Wilhelm Schneider, también brigada y de su misma edad, resultó gravemente herido, por lo que fue trasladado inmediatamente a Alemania para que se recupera se de sus lesiones, aunque finalmente falleció a consecuencia de ellas el 26 de enero de 1937. En el lugar de la colisión se colocó un monolito con una placa, en la que se recordaba el nombre de los dos fallecidos y aparecía el emblema de la unidad de tanques alemana: una calavera sobre un tanque, orlada de hojas de roble. Años después, también se decidió por este motivo darle el nombre de Avenida de Alemania al lugar donde había tenido lugar el desgraciado accidente, y que no era sino la prolongación de la carretera de Mérida, por donde los dos instructores alemanes seguramente venían o se dirigían hacia los castillos de las Arguijuelas. Con el ensanche de la Avenida, el monolito fue trasladado junto al monumento a Millán Astray frente al hospital de la Montaña. Una mañana en los años de la transición, la lápida amaneció destrozada, quitaron los restos y desde entonces se perdió el recuerdo a estos dos soldados.
De la misma forma, otra avenida cercana, que también parte de la llamada plaza de la Cruz de los Caídos (en alusión al monumento allí erigido desde 1938, en memoria de las víctimas del bando franquista), recibió el nombre de Avenida de Portugal, país que, como he comentado, también prestó una inestimable ayuda a los militares rebeldes españoles. Para completar el homenaje a los países aliados, el lugar conocido como Peña Redonda fue también rebautizado como la Plaza de Italia.
BIBLIOGRAFÍA CONSULTADA:
LA BASE ALEMANA DE CARROS DE COMBATE EN LAS ARGUIJUELAS, CÁCERES (1936-1937). Antonio Rodríguez González
Articulo PLAZA MAYOR en el diario Hoy de Serafín Martín Nieto. 8 de mayo de 2016